El sufrimiento y sus causas

Quién podrá decir que no ha sufrido en su peregrinar  por este mundo. Aún los ricos, los famosos, los sabios y los que proclaman a los cuatro vientos que son muy felices, no escapan a esta realidad. Solo cuando pasamos por el molino de la prueba llegamos a considerar el sufrimiento de otros.

Cuando falleció mi tercer hermano de forma violenta, allá por el año l988; digo mi tercer hermano, puesto que soy el primero de la familia; una de nuestras vecinas dijo a mi madre: La considero, porque ya viví la experiencia de perder un hijo y es algo que deja profundas huellas.

Las pruebas siguieron, ya que a finales de 1989, muere mi segundo hermano en accidente de tránsito. Esto fue tremendo para nosotros, pero quien más sintió el impacto, fue mi madre, ya que era una segunda prueba en tan breve tiempo. Ella hasta ese tiempo, no sufría de ninguna enfermedad; a partir de esas circunstancias comenzó a sufrir de hipertensión, debido a su sistema nervioso alterado. Es de anotar que en años anteriores a lo acontecido con mis hermanos, también tuvimos varios accidentes.

Estas duras experiencias nos hacen reflexionar y  buscar el porqué del sufrimiento, llegando al extremo de preguntar a Dios por qué a nosotros. Sin embargo hoy  podemos darnos cuenta por las experiencias vividas, que existen  cuatro clases de sufrimiento, entre otros:

1 CAUSA: “Accidentes, desastres, etc.” Las cosas acontecidas en Japón, durante y después del terremoto; las secuelas que ha dejado esta devastación, como el caso de las centrales nucleares, con la amenaza de explosión y radiación; el drama humano, por la incertidumbre de sus habitantes, al no saber qué acontecerá, con sus vidas, sus familias, su futuro, su país etc. Son un ejemplo para ilustrar; lo ocurrido en Chile con el sismo y la emergencia que vivió Haití por ese mismo fenómeno; todo ello ha traído grande aflicción a estos pueblos. Esta es una manera de sufrimiento y son acontecimientos que han dejado grande huella.

2 CAUSA: “Lo que nos imponen otros” El apóstol Santiago dice inspirado por el Espíritu Santo: ¿De dónde vienen las guerras y los pleitos entre vosotros? ¿No es de vuestras pasiones, las cuales combaten en vuestros miembros? Codiciáis y no tenéis; matáis y ardéis de envidia y no podéis alcanzar; combatís y lucháis, pero no tenéis lo que deseáis, porque no pedís. Pedís y no recibís, porque pedís mal, para gastar en vuestros deleites. SANTIAGO 4:1,2,3. El salmista y rey David exclama: Mis ojos están gastados de sufrir; se han envejecido a causa de todos mis angustiadores…Mira mi aflicción que padezco a causa de los que me aborrecen. SALMOS 6:7 y 9:13. Sufrimos entonces por la inhumanidad del hombre. La situación actual de Libia, es una muestra palpable de esta realidad; un pueblo que sufre por el egoísmo de un hombre perpetuado en el poder, pero también en derredor se mueven otros intereses y es de los que pescan en río revuelto. En  Egipto se dio una circunstancia similar y en el momento vemos cómo otras naciones van siendo influenciadas, presentando situaciones parecidas a las anteriores, todo movido por un factor común que no tiene otro nombre sino Egoísmo.

3 CAUSA: “La desobediencia”. Salomón rey de Israel dice: He aquí, solamente esto he hallado: Que Dios hizo al hombre recto, pero ellos buscaron muchas perversiones. ECLESIASTES 7:29Los dejé por tanto, a la dureza de su corazón; caminaron en sus propios consejos. SALMOS 81: 12… Pues habiendo conocido a Dios, no le glorificaron como a Dios, ni le dieron gracias, sino que se envanecieron en sus razonamientos y su necio corazón fue entenebrecido, profesando ser sabios se hicieron necios,… ROMANOS 1: 21,22.
El no tener en cuenta a Dios, le ha acarreado muchos problemas al hombre. Aún en circunstancias adversas, muchos lo han ignorado, unos quizá por orgullo, otros por ignorancia. HECHOS 17: 30.

4 CAUSA: “El ataque de Satanás” El Eterno permitió que el enemigo tocara al patriarca Job; después de tan tremendas pruebas, Dios premia su integridad. JOB 1. Igual sucedió con el apóstol Pedro, a quien El Señor Jesús le advirtió: …Simón, Simón, he aquí Satanás os ha pedido para zarandearos como a trigo, pero yo he rogado por ti, que tu fe no falte… LUCAS 22: 31, 32. Pablo también explica a los hermanos, de qué manera ha sido probado: Y para que la grandeza de las revelaciones no me exaltase desmedidamente, me fue dado un aguijón en mi carne, un mensajero de Satanás que me abofetee, para que no me enaltezca sobremanera. 2 CORINTIOS 12: 7.

Con ello Pablo, relata su propio sufrimiento. Así nosotros de una u otra forma, estamos expuestos a la prueba, pero en los planes del Eterno, todo redunda para bien; El mismo apóstol dice en el verso 9 del mismo capítulo: me gloriaré  en mis debilidades, para que repose sobre mí, el poder del Señor.
José Rubiel Pineda G.

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