¿Como estás?

Quise escribirte esta carta para decirte que te amo. Te vi cuando conversabas con tus amigos, estuve esperándote todo el día, deseando que me llamaras para saber si querías conversar conmigo y como la noche se acercaba y ya estaba oscureciendo, supe que no me llamarías.

¿Te diste cuenta que te obsequié un día hermosísimo? También espero que hayas apreciado el viento de la tarde que hoy seguro te hizo descansar y seguí esperándote. Nunca te vi llegar. Por supuesto, Me dolió y sin embargo quiero decirte que te quiero; te empezabas a dormir por la noche y decidí no despertarte, sino nada mas enviarte un rayo de luna que iluminara tu cara y tu almohada y ahora Estoy aquí, para ver si ahora sí conversamos…tengo tantos regalos para darte.

Hoy te levantaste tarde, como pudiste te arreglaste rápidamente y te fuiste a los quehaceres diarios; no te acordaste de llamarme de nuevo y esta vez sí lloré. Estabas triste y te vi tan solo que me causaste un profundo dolor, porque te comprendo; tus amigos te olvidan y por supuesto me duele, porque sucede muy a menudo, pero no obstante quiero decirte que TE AMO.

Si solo te decidieras a hablar conmigo y me oyeras, ¡Qué feliz me harías! Trato de decírtelo donde quiera que vas, cuando miras hacia arriba el cielo azul, cuando miras hacia la tierra, hacia las plantas y me doy cuenta que Me estás escuchando. Te digo en el susurro de las hojas de los árboles, en el aroma de las flores, te grito cuando andas de paseo por el río, en la voz de las cascadas, te obsequio el canto de los pájaros, te envío sin que te des cuenta el vestido calientico del sol y el perfume de los pinos del campo. El amor que siento por ti, es más grandioso que todo lo más grande que tu corazón puede llegar a imaginar. Si solo tuvieras idea de lo mucho que deseo ayudarte. Tengo muchas cosas qué compartir contigo, pero…

De acuerdo…ya no te voy a molestar, eres libre, escoge lo que quieras, es tu decisión, pero eso si, YO ya te escogí para MI.

Para despedirme quiero pedirte un favor, que en ningún momento te olvides de MI, porque TE QUIERO, porque se esperar y porque TE AMO.

“He aquí yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, cenaré con él y él conmigo.” APOCALIPSIS 3: 20.

Tu amigo: JESÚS DE NAZARETH.

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Fuente: Misión Paz a las Naciones.